Hoy os traigo una fantástica y deliciosa tarta de queso
​
Además de lo buena que está lo mejor de todo es que no necesita horno, por lo que los más pequeños pueden ayudaros a prepararla. Vamos a por ella.
Necesitamos:
​
Para la base:
-
150 gramos de galletas maría
-
70 gramos de mantequilla o margarina
Para el relleno
-
200 ml de creme fraîche (nata fresca, si no encuentras puedes usar una normal)
-
400 gramos de leche condensada (1 bote pequeño)
-
600 gramos queso crema (filadelfia o similar)
-
1 paquete de preparado para flan
Para la cobertura:
-
300 gramos de fresas
-
1 hoja de gelatina (opcional)
-
zumo de medio limón
-
3 cucharadas de azúcar
​
​
Lo primero de todo deberemos triturar las galletas. Si tenéis un robot de cocina facilitará el trabajo pero si no tenéis no hay problema; colocar las galletas en una bolsa y dale golpecitos hasta conseguir que las galletas se hayan convertido en polvo. Una vez las galletas trituradas pasamos al siguiente paso; derretimos la mantequilla y la mezclamos con el polvo de las galletas que acabamos de triturar. Una vez la mezcla de galleta hecha la vertimos en el molde y presionamos para que quede toda uniforme. Lo metemos al congelador mientras preparamos el siguiente paso, el relleno de nuestra tarta.
​
Para nuestro relleno verteremos los ingredientes en una cazuela que tendremos a fuego lento. Una vez vertidos los ingredientes, removemos hasta eliminar todos los grumos. Subimos el fuego y seguimos dando vueltas hasta que hierva. Una vez hierva lo retiramos del fuego. Sacamos la base del congelador y vertemos la crema de queso sobre la base de galleta. Lo extendemos bien y lo llevamos al frigorífico, como mínimo deberemos tenerlo un par de horas.
​
Para finalizar nuestra tarta prepararemos la cobertura de fresa. Para ello hidrataremos la gelatina en un vaso de agua durante unos 5 minutos. Pondremos en una sopera pequeña las fresas lavadas, el zumo de limón y el azúcar. Una vez todo en la sopera lo removemos suavemente mientras trituramos las fresas. Cuando tengamos todo bien triturado (al gusto de cada uno), añadiremos la gelatina bien escurrida y lo mezclaremos con todo hasta que se disuelva.
​
Último paso y el más sencillo, sacamos la tarta de la nevera y distribuimos nuestra cobertura sobre ella, volvemos a meterla en la nevera un par de horas y ya podremos disfrutar de ella.
​
​
¿A qué estas esperando para hacerla?
​
​
​
